The conversation is just getting started.
(La conversación tan solo está empezando)
Así terminaba un artículo de uno de los blogs de Google y no es casualidad que esa frase la puedan haber escuchado en varios otros lugares de Internet.
Hoy en día Internet y las personas nucleadas en derredor son una gran mesa de bar que nunca termina porque el bar nunca cierra y siempre sigue viniendo la penúltima botella de cerveza.
El mundo hoy puede ser explicado de varias formas categorizando a la gente según muy diferentes escenarios: buenos y malos, blancos y negros, sucios y limpios, los de arriba y los de abajo, los del norte y los del sur, los comunistas y los capitalistas, los ricos y los pobres, los del campo y los de la ciudad, y un largo etcétera de dicotomías donde identificar grupos de intereses y pertenencia.
Lo más interesante de ello es que esos grupos se intersecan, por lo cual existirán buenos negros limpios de arriba que viven en el sur, son comunistas ricos y su casa está en el campo. Pero también buenos blancos sucios de arriba que vivien en el sur son capitalistas ricos y su casa está en el campo.
Pero desde 2004 en adelante y especialmente con más fuerza desde 2007 y totalmente demostrado en 2009 se puede definir un nuevo ámbito de clasificación: los que participan de Internet y los que no.
Los que participamos de Internet estamos inmersos en «La Gran Conversación». Los que no, van de simples usuarios que usan internet para un fin específico no colaborativo hasta los que no conocen Internet ni en figuritas.
Esa Gran Conversación es el resultado de la Web de Tim Barnes-Lee y también de la Web 2.0 y su legado: las masas al poder, la gente interconectada. Hoy en día, quienes contribuimos con contenido en Internet participamos de diferentes comunidades en las cuales con mayor o menor libertad e interés creamos y «subimos» contenido a la Internet, criticamos y aplaudimos, somos vistos y escrutados, criticados y aplaudidos.
Internet hoy, para esas personas que participamos de la Gran Conversación es como la mesa del bar German’s que quedaba en la calle Canelones a dos cuadras de la Plaza Varela. Un tema empieza en una esquina de la mesa y va ramificándose de persona a persona, todos van participando y dando su propia visión y generando nuevas ramas en la conversación. Sin quererlo, los de la otra punta de la mesa ni saben que realmente hablan los de esta punta de acá, pero pueden estar seguros que su conversación está siendo influida por ellos a través de la ramificación que enriquece La Gran Conversación.
Por eso cuando la gente entra a Facebook, no saluda a todo el mundo, simplemente participa como puede. Todos podrán escucharlo, sobre todo quienes están más cerca. Y eso se dá porque la conversación nunca termina. Nunca.
Irse a dormir en la vida real es como ir al baño en la mesa del bar. Todo el mundo sabe que luego de desagotar el último medio litro de cerveza vas a volver para seguir tomando y participando. La Gran Conversación tendrá un espacio siempre preparado para ti y también para el que llegue tarde.
Por Canelones, del lado norte, una esquina a 2 cuadras de Bulevar. No me acuerdo demasiado bien… creo que es Acevedo Díaz.
Fede, yo vivo frente a la Plaza Varela, frente a donde era ICorp en sus comienzos. ¿Dónde queda o quedaba el German’s?
Jaja… no, no… nada de Matrix ni nada de eso. Eso es solo para los fantaseosos.
¿Acaso cada uno de nosotros no se comporta diferente cuando no están los ojos escrutadores? Por ejemplo, las reuniones con «la gente del trabajo» no son para llevar a la esposa o a la novia. Eso era lo de German’s los jueves cuando salíamos de Icorp.
Cuando te reunís con tus amigos o amigas, tamnbién. Yo que he tenido reuniones con amigos donde yo he sido el único hombre, he aprendido que nunca voy a querer saber como se comporta mi pareja en una reunión con sus amigas.
Y esto es lo mismo, en Internet la gente hace su juego. No es más que una extensión del juego que hace todos los días.
Y ahora vas a decirme que tengo que decidir entre la píldora roja y la azul. Muy bueno el post.
La vida real es todo.
Sólo que antes no sabíamos como vivir esa parte que descubrimos ahora.
me gusto lo que escribiste. lo que me quedaduda es cual es la vida real? :)