El Mundo está lleno de pequeñas oportunidades de negocio que prometen alimentar nuestras pancitas todos los días así como pagar unas pequeñas vacaciones en la Costa de Oro e incluso mandar a nuestros hijos a un tranquilo colegio de barrio como el Arnold Gesell.
Pero de todos los pequeños emprendimientos que aparecen aquí y allá, no todos prosperan y terminan cerrando por una u otra razón.
Tomando el listado del artículo original, doy mis opiniones personales.
1) Mercado inexistente
¿Cuántas veces a pasado por nuestra mente hacer terrible negocio produciendo tal o cual producto o servicio? El problema no está ahí. El problema está en cuando logramos crear el producto y salimos a venderlo…. pero no encontramos nadie que quiera comprarlo.
¿Qué hago entonces? Antes de comenzar la producción debemos considerar si hay quienes estén dispuesto a pagar por nuestro producto lo suficiente como para que nos retorne ganancia. Loego de ello, sí producir. Pero hasta que no lo sepamos, no debemos seguir adelante.
Hace unos años escuché a Rodolfo Oppenheimer decir: «tráiganme el primer cliente». Y es muy cierto. Si hay un cliente, hay un producto para desarrollar.
2) Poca estructura de capital o flujo de caja
Sin dinero, lamento decirles, es dificil arrancar un negocio. Y mantenerlo es imposible. Así que si quieren rebatir mi opinión, bienvenidos sus comentarios.
Sin un dinero de respaldo, no se puede comprar stock, no se pueden pagar envíos, no se puede pagar un cadete o una secretaria. Peor aún si ese negocio es nuestro único ingreso de dinero a nuestras vidas, lo que lo hace más dificil.
Recuerden: los bancos solo le pretan dinero a quienes demuestren no necesitarlo.
3) Falta de conocimientos de Marketing
Podemos tener la terrible idea y convertirla en producto y tener un poco de capital para bancarnos mientras llegamos al punto de equilibrio. ¿Cómo lo ofrecemos? ¿Cómo lo vendemos? ¿Cómo nos damos a conocer?
No saber ofrecer el producto adecuadamente, conocer poco de técnicas de ventas o dedicarse poco a crear herramientas de marketing es uno de los pecados capitales que llevarán un negocio a la ruina.
4) Mal gerenciamiento
A veces puede suceder que nosotros mismos somos los que producimos, los que gerenciamos, los que cobramos, los que hacemos los envíos, los que contratamos servicios, los que limpiamos y en fin, hacemos todo.
No saber delegar (o no poder hacerlo) es una muestra de no saber gerenciar correctamente. Y evaluar objetivamente el como funciona nuestro emprendimiento es otro error. Hay veces que habrá que recortar uno u otro gasto y otras veces habrá que invertir en uno u otro lugar.
Saber hacerlo y hacerlo a tiempo será gerenciar bien. Hay veces que no hay que tener un MBA para llevar adelante el negocio, solo pensar bien con la razón y dedicarle el tiempo justo.
5) Poco contacto con el cliente
A mi una cosa que me encanta es hablar con el cliente. Siempre busco reunirme con él y conocerlo. Tener tiempo de evaluarlo. Descubrir que necesita y aprender de su negocio.
En un negocio pequeño no podemos darnos el lujo de tratar a nuestros clientes como un número más en la estadística. Si llegamos a eso, estaremos perdiendo la oportunidad de reconquistarlos día a día.
Y si perdemos un cliente, podremos perder otro y eso podrá llevar a la ruina nuestro negocio.
Muy buen post,
saludos